Si bien acompañamos y valoramos esta idea de premiar al vecino que cumple, tenemos una mirada muy diferente sobre lo que es ser “buen contribuyente”. Para el municipio son simplemente aquellos capaces de pagar la tasa en el primer vencimiento, y por ello son premiados con un 46% de descuento. Si esto decididamente fuera así, pondrían al resto de los contribuyentes en un escenario de especuladores y/o morosos, catalogándolos de pésimos contribuyentes que no merecen el descuento y que por lo mismo deben pagar con el 41% de aumento. Visto así; ¿es tremendamente injusto no?
Pues bien, lamento decirles que es lo que terminaron aprobando los concejales.
Está claro que quienes pagan en el primer vencimiento son quienes cuentan con mayor poder adquisitivo, los más pudientes que no tienen problemas en honrar sus compromisos. De hecho también son alcanzados con esta medida quienes pagan todo el año junto, contando también con el beneficio del descuento de un mes. Pareciera ser que cuanto uno más tiene, más beneficios recibe. Pero aún así, no los distingue de aquellos que, administrando sus recursos en función de sus ingresos, con gran esfuerzo y sacrificio, tratan de cumplir con los tributos de su municipio.
Por ello, nuestra propuesta era que el beneficio alcance hasta el segundo vencimiento, que se abona dentro del mismo mes, y con escasos días de diferencia.
Es bueno aclarar y para que se sepa económicamente de que estamos hablando, que la incidencia del cobro de la tasa en los recursos del municipio, no alcanza al 15% y que históricamente la recaudación en el primer vencimiento de la TGI nunca superó más del 32/33% de su emisión. Tal vez, la decisión de solo considerar el primer vencimiento, tenga que ver con que al ser un universo chico que alcanza a poca gente, económicamente, el impacto del beneficio, no sea significativo para el municipio.
Estamos convencidos que este privilegio debería haber llegado a los dos primeros vencimientos que se abonan dentro del mismo mes, no solo para que no quede simplemente en lo discursivo, sino que por el contrario, en la práctica se vea reflejado en el terreno llegando a un sector más amplio de nuestra sociedad.
Insisto, haber aprobado una premiación bajo la premisa del “buen contribuyente” en estas condiciones, lo único que ha conseguido es dejar al 50% de estos afuera, y no me parece justo. No merecen ser castigados.
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