Así se resolvió en un juicio oral y público que finalizó hoy en Las Toscas. El condenado tiene 28 años y su hija, ocho años. El fiscal que investigó el caso es Norberto Ríos (foto).
Un hombre de 28 años identificado como Eduardo Ramírez fue condenado hoy a ocho años y seis meses de prisión de cumplimiento efectivo por haber abusado sexualmente de su propia hija, una niña de ocho años. Así lo resolvió el juez Mauricio Martelossi, en el marco de un juicio oral y público realizado en Las Toscas, el primero de este tipo que se realizó en esa ciudad del norte provincial.
La sentencia condenatoria impuesta a Ramírez fue por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante calificado por ser cometido por su ascendiente. Se conoció este mediodía en la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) de Las Toscas. En tanto, el juicio había comenzado el pasado jueves con los alegatos de apertura de las partes.
El fiscal que investigó el caso fue Norberto Ríos, de la Unidad Fiscal Las Toscas.
En Tacuarendí
La denuncia contra Ramírez fue radicada por su expareja –y madre de la menor– en la Comisaría de la Mujer de la ciudad de Villa Ocampo el lunes 25 de mayo del año pasado. Según relató la mujer, los delitos habían sido cometidos en las últimas horas del domingo 24 y en las primeras horas de ése lunes 25 en la vivienda del detenido en la localidad de Tacuarendí, lugar al que la menor se había mudado unos días antes para convivir con él.
La sentencia condenatoria impuesta a Ramírez fue por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante calificado por ser cometido por su ascendiente. Se conoció este mediodía en la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) de Las Toscas. En tanto, el juicio había comenzado el pasado jueves con los alegatos de apertura de las partes.
El fiscal que investigó el caso fue Norberto Ríos, de la Unidad Fiscal Las Toscas.
En Tacuarendí
La denuncia contra Ramírez fue radicada por su expareja –y madre de la menor– en la Comisaría de la Mujer de la ciudad de Villa Ocampo el lunes 25 de mayo del año pasado. Según relató la mujer, los delitos habían sido cometidos en las últimas horas del domingo 24 y en las primeras horas de ése lunes 25 en la vivienda del detenido en la localidad de Tacuarendí, lugar al que la menor se había mudado unos días antes para convivir con él.
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